Enfrentó la adversidad y hoy combate la desnutrición
Desde pequeña me gustó estudiar y conocer cosas nuevas, pero fui diagnosticada de cisticercosis cerebral, una infección parasitaria de los tejidos causada por los quistes larvarios que se hospeda en el cerdo, y que forman quistes en varios tejidos del organismo humano. El proceso de recuperación fue extenso y complicado y afectó mi memoria a corto plazo.
Sin embargo, gracias a los cuidados familiares y a la plasticidad cerebral, capacidad de modificar hábitos o conocimientos predeterminados y aprender cosas nuevas, logré una recuperación completa. Esta parte de mi vida influyó para decidirme por la nutrición. Así, pensé, desarrollaría la investigación científica para contribuir al bienestar de las personas.
Cursando el primer año de básico, participé en la Olimpiada Nacional de Ciencias de la Universidad de San Carlos (USAC) y obtuve el tercer lugar a nivel nacional.
Mi práctica clínica fue en la pediatría del Hospital Roosevelt, parte de ella consistió en calcular alimentaciones parentales para recién nacidos prematuros o de bajo peso internados en el intensivo. La nutricionista titular me explicó que para obtener la medida de carbohidratos y de agua requeridos, se hacía “al tanteo”, se tomaban cantidades de dos concentraciones de dextrosa, hasta que la suma de ambas fuera la más próxima a lo requerido.
Repasé el procedimiento en mi casa y descubrí un método para obtener las cantidades exactas de cada concentración y ahorrar tiempo debido a la alta demanda. Por su funcionalidad hoy se usa en el Hospital Roosevelt y en otros hospitales del país.
En mi plan por erradicar la desnutrición me dediqué a buscar becas para estudiar una maestría. El camino se me dificultó por no dominar el inglés, pero lo estudié y finalmente conseguí una en Epidemiología, en Brasil. Y después el doctorado, en México, donde trabajé en generar evidencia para influir en las políticas públicas que atienden los problemas de nutrición/salud de las poblaciones. Finalmente regresé a Brasil, para un posdoctorado en desigualdades en nutrición.
Hoy trabajo en la Organización Mundial de la Salud -OMS-, en Ginebra, Suiza monitoreando el estado nutricional global hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible -ODS-. Y pienso que, si crees en ti y trabajas duro, vencerás las adversidades.